miércoles, 14 de enero de 2015

DANDO VUELTAS AL OVILLO CON PENELOPE

Parece que lo que toda la vida se ha venido llamando "ser más vaga que la chaqueta de un guardia" o "no atreverse" o "dejar todo para mañana" ahora se llama "procrastinar". Reconozco que ha sido no hace mucho cuando oí la palabreja por primera vez, y tras unas cuantas veces, en distintos foros, escuchándola, me he decidido a buscarla y enterarme, de una vez por todas, de qué significa.

Resulta que es una manera "muy de postureo" (en el sentido de molona, al menos a mí así me suena)  para describir en parte mi situación. 

La procrastinación (del latínpro, adelante, y crastinus, referente al futuro), postergación o posposición es la acción o hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables
Fuente: Wikipedia 

Pero yo me veo más en la línea de "la tejedora de sueños". No, no hablo de que ahora a mis 30ylargos vaya a iniciarme en el mundo de las agujas (que también podía ser, dicen que es muy relajante), si no de Penélope. Esa, sí, la mujer de Ulises (el de la Odisea) que tejía de día y deshacía de noche intentando evitar tomar una decisión.

La decisión en su caso era con quién se casaba, y decía que lo anunciaría una vez terminado el sudario para un rey de la época. 

Pues yo soy esa Penélope, aunque no tengo que decidirme entre mis pretendientes, si no que de día me quejo, protesto, y sigo quejándome de las cosas que no me gustan de mi vida actual. Y de noche pienso, le doy vueltas a todo y a todos. Se me ocurre que debo ponerme en serio con mi vida. Que debo sentarme y analizar. ¿el qué? Pues ese es el problema, no lo sé. Si el tema del día trata de lo laboral, esto ya es un sinvivir. Lo dejo, sigo, busco, cambio, vuelvo....Penélope tendría que comprar ovejas, mejor que lanas, porque madre mía.....

La verdad, finalmente, es que es cierto. Soy como Penélope, pero sin ni siquiera agujas y lana. no puedo deshacer nada de lo que decido porque ni siquiera decido.

Y mientras tanto, sigamus procrastinandum.






2 comentarios:

  1. Yo soy igual que tú, por lo menos me consuelo con que sabemos que hay que cambiar,hasta que demos el lado procrastinemos,un besazo

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  2. Si de verdad quieres insiste. Más tarde o más temprano conseguiras terminar de tejer el sudario para el rey de tu época. ¡Besos!

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